Historia y cultura
De Mula
Historia y cultura
Del Almendro
A nivel mundial, ya desde el año 1.400 AC, encontramos referencias a las almendras, desde la mitología griega hasta la Biblia. El Libro de los Números de la Biblia habla de la vara de Aarón que floreció y dio almendras.
Entre el 600 y el 900 DC, los almendros florecieron en áreas como España, Marruecos, Greca e Israel, y sus cosechas alimentaron a los exploradores que viajaban por la Ruta de la Seda hacia China. España es el único país que ha mantenido una importante industria de la almendra y sigue siendo uno de los mayores productores de la misma.
La Región de Murcia cuenta con 74.274 hectáreas de almendro, lo que la convierte en la cuarta productora a nivel nacional, donde cabe destacar que Lorca, Mula y Jumilla poseen el 63,5% del total de producción ecológica de este producto, convirtiéndose así en uno de los cultivos más importantes de la zona.
Cultivada en el clima mediterráneo, el ciclo de la vida anual de la almendra tiene muchas etapas y una destacada belleza natural.
De noviembre a enero los almendros pasan por un período de letargo, donde pierden sus hojas y se relajan en los inviernos cuando los árboles almacenan nutrientes y energía para la cosecha del próximo año. Hacia el final de la latencia los brotes comienzan a hincharse en las ramas de cada árbol en preparación para la floración.
Entre finales de enero y durante febrero los capullos de los almendros estallan en hermosas flores blancas y rosas. Es en este momento cuando los paisajes de los campos de Mula muestran un esplendor inigualable.
La Feria del Almendro en Flor de Mula se presenta como una oportunidad para realizar una celebración popular donde quede reflejada una parte muy importante de la vida y la cultura de la ciudad de Mula, usando como columna vertebral la increíble floración de nuestros almendros y su singular paisaje.
Tendremos la oportunidad de realizar diversas actuaciones que servirán de escaparate para descubrir a vecinos y visitantes nuestra cultura, artesanía, gastronomía y tradiciones, uniendo pasado, presente y futuro.
En estas jornadas tienen cabida rutas de interpretación, actuaciones folclóricas locales y regionales, degustaciones gastronómicas, muestras de artesanía y etnografía, mercadillos, concursos y un sinfín de divertidas y atrayentes actividades que no te podrás perder.